viernes, 10 de enero de 2020

Mi propósito 2020

Despego con la punta de la lengua los restos del último polvorón, y  salgo pitando hacia la consulta del endocrino.

-Pelirroja tienes que empezar a cumplir los propósitos de este año, y cuanto antes empieces mejor
( Recuerda como llora la bascula cada mañana cuando decides ir a pesarte, e impides que salga corriendo con esas diminutas patas de metacrilato) - me grita hecha un basilisco la única neurona medio responsable que me queda).

Pero....Seguro que  me pone a dieta,; Me quitara las tostadas del desayuno con extra de margarina, la palmera a media mañana, la copa de vino a la hora de comer, la media barra de pan  que unto con el segundo plato, el pastel del postre, el azúcar del café, las patatas fritas a media tarde, la pizza de la cena, y el vaso de leche con miel y cola cao antes de dormir.

 -Con un poco de suerte me dejaran seguir quedándome olfateando como un sabueso en la puerta del obrador mas cercano  casa.

Esto no va a funcionar.... y segundos antes de entrar a la consulta.... Sopeso la opción de marcarme un "novia a  la fuga".
Intento Fallido. Cuando me dispongo a ponerme de pie, el monstruo de la bata blanca  con libreta en el bolsillo superior , me llama a consulta.

Almaceno en los carrillos un puñado de pasas con chocolate, y las voy tragando sin masticar con disimulo mientras me someten  al "tercer grado" . 
Mientras el señor jode placeres escribe en su ordenador, tararea lo suficientemente " oximoron"  bajo-alto , la puñetera canción del verano mas horrible que han podido... ¿Componer?           ¿Vomitar?
La salchipapa.

Y si, tenia razón, mucha razón me han quitado de todo (menos de dejar de respirar ) me siento desmoralizada, y dudo sobre mi capacidad de poder lograr este propósito.

Al llegar a casa Oreo me esta esperando maullando  como cada día. -    !Peliteñida acaríciame!   !Eh!         !Humana!       !Aquí!      !Aquí!.

Y mirando fijamente a la librería los ojos me hacen chiribitas al leer el escritor  de un libro olvidado, Carlos Rios.

!Wuala!       

Me levanto de un salto haciendo volar por los aires al gato,  mientras le piso el rabo a la perra  y el Sr. y la Sra. Pez se esconden tras las plantas del acuario tapándose los ojos,
al verme tropezar con la maldita alfombra.

Por un momento me siento Cleo y moviendo el lazo de mi pelo, lo tengo claro.

Voy a ser realfooding.